martes, 8 de abril de 2008

Yesterday...

A propósito de la sobredosis de marxismo que he tenido en los últimos meses…

Después de leer un cuento sobre niños pobres, mi profesor de quinto grado de primaria preguntó al grupo si considerábamos que alguna vez se iba a acabar la pobreza en el mundo. Ante el asombro de mis compañeritos utópicos, yo contesté que siempre iba a haber pobreza… y expliqué de pie frente a todos: mientras vivamos en un sistema capitalista, siempre habrá clases sociales y por lo tanto siempre habrá pobres… (luego mencioné a Cuba como ejemplo de un país con otro sistema y donde no había pobreza). No pregunten por qué recuerdo esto ni porqué una niña de 10 años pensaba aquello… Con más años y teorías sociales complicando mi cabecita, me pregunto en qué lugar vamos dejando la seguridad y simpleza de las respuestas infantiles.


Dos conclusiones:
1. Si una niña puede entender el problema de la pobreza, ¿por qué los políticos no?
2. ¿Acaso era yo una niña marxista?

4 comentarios:

Carlos Mal dijo...

Sí eras marxista. Lo que más me sorprendió de tu anécdota es que no entiendo cómo has crecido para convertirte en algo tan distinto! Bueno, le pasó a San Agustín, no?

LilaLili dijo...

Pero yo no pienso escribir un libro con mis confesiones...

Miriam García Aguirre dijo...

lili, que bueno que te fuiste a mexico y que creaste este blog. me gusta entrar y leer cada vez textos llenos de energia. la ciudad nos mueve, nos sacude, igual que la distancia. espero que un dia destos podamos echarnos otra platicada en el seven. cuidate. un abrazo desde tijuanita.

LilaLili dijo...

Gracias por pasar por aquí Miriam... cuando coincidamos en esa ciudad mítica será en el seven entonces :)